El Dräger Flame 1500 está equipado con tres sensores infrarrojos. Gracias a ellos, puede detectar fuegos causados por hidrocarburos incluso a gran distancia. Esta fiabilidad le permite cumplir los requisitos de la norma IEC 61508 sobre la integridad de la seguridad según SIL2. El detector de llamas también dispone de interfaces HART^® a través de las cuales puede conectarse, por ejemplo, directamente al sistema de alarma contra incendios. Además, el Flame 1500 consume muy poca energía.

El Flame 1500 mide la radiación infrarroja en tres longitudes de onda diferentes y las compara con el valor de referencia del CO₂, que se produce durante la combustión de hidrocarburos. En combinación con el análisis del parpadeo de la llama, el complejo algoritmo identifica un fuego y descarta posibles fuentes de interferencias. De este modo, el Flame 1500 evita de forma fiable las falsas alarmas causadas por posibles fuentes de fallo, como los trabajos de soldadura o la radiación de cuerpo negro.

La prueba de verificación óptica (OVT) comprueba automáticamente los componentes electrónicos y ópticos del Flame 1500 sin afectar al campo de visión. El LED de tres colores de la parte frontal permite ver rápidamente el estado de la unidad. El verde indica un funcionamiento normal, el amarillo un fallo y el rojo alarma de fuego.

La carcasa de acero inoxidable o aluminio es muy robusta y resistente a la intemperie. La ventana de visualización se calienta para protegerla frente a la formación de hielo y el empañamiento. De esta forma se puede utilizar el Flame 1500 con seguridad en una gran variedad de condiciones ambientales.