​En la industria del petróleo y el gas, hay a menudo en las plantas áreas espaciosas o laberínticas de difícil acceso o con gasoductos que presentan numerosas conexiones. En esta situación, los sistemas de detección de gases convencionales funcionan al límite. Sin embargo, incluso en estas condiciones, una cámara óptica de detección de gas permite visualizar la fuente y la intensidad de las fugas de gas. Es el complemento perfecto para su sistema de detección de gases, al proporcionar una evaluación más precisa y rápida de un posible peligro.

​La MetCam monitoriza sus instalaciones de forma automática las 24 horas del día. A diferencia de lo que ocurre con los detectores puntuales, no es necesario que la fuente del gas esté en las inmediaciones de la cámara. Basta con que la fuente se encuentre en el campo de visión de la cámara. De este modo, ni el viento ni otros factores similares influyen en la detección. La MetCam detecta las fugas de gas en una fase inicial y puede avisar de su presencia. Así, podrá adoptar las medidas de contención con mayor rapidez. Esto se traduce en más seguridad para sus instalaciones y en una mayor eficiencia.

​La cámara visualiza la nube de gas como una superposición de color sobre la imagen de vídeo en blanco y negro y cuantifica la concentración de una manera independiente. Solo tendrá que interpretar la situación desde una distancia segura, por ejemplo, desde la sala de control. También puede usar la MetCam para medir emisiones o como cámara de vigilancia con imágenes a color.

​La cámara reconoce de forma independiente si la óptica está sucia o tapada, y le envía un aviso para comunicarlo. De esta forma se reduce el número de falsas alarmas y se garantiza que el sistema esté listo para utilizarse. A fin de adaptarse a las condiciones meteorológicas cambiantes, la MetCam realiza una autocalibración cada cierto tiempo. No es necesario llevar a cabo un mantenimiento o calibración especiales; el mantenimiento necesario es mínimo.

​La MetCam ofrece diversas interfaces de comunicación y admite los protocolos correspondientes de transmisión de datos y vídeo. La interfaz de corriente analógica de 4 a 20 mA, junto con HART^®, puede utilizarse para transmitir las alarmas y el estado del dispositivo. La transmisión de vídeo se realiza a través de la interfaz Ethernet mediante LAN. Hay dos modos de funcionamiento diferentes disponibles al mismo tiempo. Uno de ellos es la transmisión de vídeo en blanco y negro con una superposición en color de la nube de gas detectada en caso de fuga. El segundo modo es un vídeo a color para la monitorización de áreas, en el que no se muestra la concentración de gas.

​Todos los eventos y los datos medidos se almacenan de forma automática, para que pueda evaluarlos y analizarlos posteriormente. También puede crear registros de emisiones sin apenas esfuerzo.