​Los sistemas de refrigeración se utilizan actualmente en casi todos los ámbitos de la logística y la industria. Dado que técnicamente resulta casi imposible sellarlos de forma hermética, cada año se libera al medio ambiente hasta el 30 % de la carga de refrigerante. Los sistemas de detección de gases de Dräger permiten detectar incluso las fugas más pequeñas en una fase inicial para acometer las medidas correctivas necesarias. De esta manera se incrementa la seguridad del sistema, se reducen los costes de funcionamiento de los refrigerantes y de la energía eléctrica, al tiempo que se contribuye de una forma considerable a la protección del clima.

​Gracias a su tecnología de infrarrojo no dispersivo (NDIR), el transmisor de refrigerante detecta de forma rápida y fiable el refrigerante incluso en el rango de ppm en el aire ambiente. La tecnología de medición óptica funciona según un principio de medición física, sin reacciones químicas ni piezas de desgaste. Esta estabilidad de medición proporciona seguridad en el funcionamiento del sistema de refrigeración. También reduce los costes de verificación y recalibración.

​El sensor de infrarrojos mide el refrigerante en el rango de ppm para que el transmisor pueda detectar una fuga a tiempo. También facilita el cumplimiento de los límites de exposición laboral. Conecte el transmisor de refrigerante a través de una interfaz analógica o digital con una unidad de control Dräger a un sistema de advertencia por presencia de gas. Dicho sistema le avisa con antelación cuando se superan los valores de alarma preestablecidos.

​El detector, compacto y con protección IP54, es fácil de instalar con apenas cuatro tornillos y una sola entrada de cable. El diseño de la entrada de gas permite un intercambio rápido de gas para obtener un tiempo de respuesta corto. También puede fijar el adaptador de calibración en él con el fin de comprobar y calibrar el transmisor de forma sencilla. Los ajustes del dispositivo se realizan mediante los botones del panel frontal. Los indicadores LED proporcionan al usuario información visual sobre el estado del dispositivo y le ayudan a desplazarse por las opciones del menú.

​El transmisor cumple con los requisitos actuales de la normativa europea de F-gases (EU) n.º 517/2014 sobre gases fluorados de efecto invernadero y garantiza la supervisión de los sistemas de refrigeración por medio de un sistema de detección de fugas (LDS).

​Con el transmisor de refrigerante de banda ancha, se pueden medir varios gases en una única configuración. Está calibrado de fábrica para 2.000 ppm de R134a, pero también es idóneo para medir R125, R404a, R407a, R410a, R448a, R449a y R407f. Mediante sencillos factores de conversión, que se encuentran almacenados en el software del detector de gas, los valores medidos pueden corregirse para obtener una medición más precisa.