
Detección de amoniaco
Póngase en contacto con nosotrosTecnología para gestionar el uso responsable del amoniaco
Presentamos la solución Draeger para aplicaciones de amoniaco anhidro: tecnología probada que garantiza la seguridad en la vida diaria, minimiza el riesgo de la planta y forma parte del plan de gestión de refrigerantes de cualquier instalación, según lo exige la EPA/OSHA.
Con los mandatos federales y las restricciones impuestas a los fluorocarbonos, las industrias se ven obligadas a cambiar rápidamente sus sistemas de refrigeración. En este sentido, el amoniaco es uno de los gases de refrigeración más utilizados. El amoniaco es altamente tóxico y combustible, pero se puede conseguir con facilidad, presenta valores bajos de GWP (potencial de calentamiento global) y ODP (reducción potencial de ozono) y es una solución rentable. Cuando se emplea en el sector de la refrigeración, el amoniaco puede resultar muy eficaz para conservar los alimentos y las bebidas a las temperaturas adecuadas, pero también puede plantear riesgos para la salud que no se pueden pasar por alto.
Aunque el olor característico del amoniaco hace que sea relativamente fácil de identificar al principio, es necesario realizar una calibración precisa para garantizar la seguridad de los seres vivos. Por lo tanto, se precisan monitores en tiempo real para poder decidir de forma continua qué equipo de protección personal (EPP) se necesita con el fin de proporcionar una protección adecuada contra el amoniaco. Según la guía de bolsillo del NIOSH, la protección contra niveles bajos de amoniaco (hasta 250-300 ppm) se puede conseguir apenas con un respirador que disponga de cartuchos apropiados para amoniaco. El acceso a lugares donde existan concentraciones superiores a 300 ppm o concentraciones desconocidas requieren un suministro de aire con presión positiva o equipos de respiración autónoma. Para concentraciones aún más altas, se necesitan trajes de encapsulamiento integrales (Nivel A) debido a la naturaleza alcalina altamente reactiva del gas amoniaco. En concentraciones superiores al 15 % (150 000 ppm), la atmósfera de amoniaco se vuelve potencialmente explosiva, se debe detenerse cualquier actividad y todo el personal debe abandonar el lugar. No obstante, las mezclas que contienen amoniaco contaminado con aceite lubricante del sistema pueden presentar un rango explosivo mucho mayor. En un estudio realizado para identificar cómo influye el petróleo en los límites de inflamabilidad del amoniaco se comprobó que el petróleo reducía el límite inferior de inflamabilidad hasta en un 8 %, según el tipo y la concentración del petróleo. Se necesitan monitores de amoniaco precisos, fiables y continuos, fijos y portátiles, para poder tomar estas decisiones.
Detección fija de gases
La elección del sensor adecuado para su aplicación depende de las concentraciones previstas, las ubicaciones y otros factores que se den en sus instalaciones. A menudo, se necesitan dos detectores de amoniaco separados para el control de la ventilación de emergencia y para el apagado del sistema eléctrico de la maquinaria. Un detector de rango de baja concentración (por ejemplo, de 0 a 250 ppm) puede proporcionar una resolución y precisión adecuadas para iniciar una operación de ventilación de emergencia. Un segundo detector de rango de alta concentración (por ejemplo, 0-10 % LEL, o de 0 a 15 000 ppm) proporciona la información para iniciar los apagados eléctricos de la maquinaria. Los puntos de consigna de control de cada detector de rango de concentración serán diferentes. Por ejemplo, el sensor de control de la ventilación está configurado para iniciar el modo de ventilación de emergencia a una concentración de 150 ppm. Por su parte, el sensor de control de apagado eléctrico de la maquinaria desactivará el suministro eléctrico a una concentración predeterminada, por ejemplo, de 15 000 ppm.
Detección monogás
La elección de la solución de detección portátil de gases adecuada resulta determinante para proteger la seguridad de la vida. El detector monogás Dräger PAC 8000 para amoniaco (NH3) presenta varias ventajas importantes:
Protección respiratoria
La elección del sensor adecuado para su aplicación depende de las concentraciones previstas, las ubicaciones y otros factores que se den en sus instalaciones. A menudo, se necesitan dos detectores de amoniaco separados para el control de la ventilación de emergencia y para el apagado del sistema eléctrico de la maquinaria. Un detector de rango de baja concentración (por ejemplo, de 0 a 250 ppm) puede proporcionar una resolución y precisión adecuadas para iniciar una operación de ventilación de emergencia. Un segundo detector de rango de alta concentración (por ejemplo, 0-10 % LEL, o de 0 a 15 000 ppm) proporciona la información para iniciar los apagados eléctricos de la maquinaria. Los puntos de consigna de control de cada detector de rango de concentración serán diferentes. Por ejemplo, el sensor de control de la ventilación está configurado para iniciar el modo de ventilación de emergencia a una concentración de 150 ppm. Por su parte, el sensor de control de apagado eléctrico de la maquinaria desactivará el suministro eléctrico a una concentración predeterminada, por ejemplo, de 15 000 ppm.